Informa, José María JericóSe abre el abono de la feria con el primer festejo, una novillada sin caballos en la que intervienen lidiando novillos de la ganadería de "La Dehesa de Valhondillo" de El Casar de Talavera (Toledo) de juego desigual, manseando y con un primero que no se tenia en pie.
Los novilleros Jorge Torá y Alfredo Bernabéu de la Escuela de Alicante y el representante de la Escuela de Bézier (Francia), Dorian, se las vieron con estos erales con los que acusaron su falta de conocimientos. terrenos, distancias, tiempos, parar, templar, mandar, etc. Todo lo propio del chaval que empieza en esta difícil profesión.
Alfredo Bernabéu anduvo animoso toda la tarde, Se dejo enganchar los engaños y fue desarmado en varias ocasiones. Esto hizo que sus faenas no fueran todo lo contundentes que se hubiera deseado. Mato de certeras estocadas a sus dos novillos y dio la vuelta al ruedo en el primero y corto la oreja del segundo de su lote.
Jorge Torá, este chaval de Elda demostró ganas de ser torero a la antigua, es decir, a base de revolcones y levantarse sin mirarse, a pesar de que el primer revolcón que recibió cuando el novillo se le vino cruzado le dejo 'grogui' por unos instantes. Al segundo de su lote le extrajo varias tandas por ambos lados de merito pegado a tablas. El fallo a espadas hizo imposible el que pudiera cortar algún trofeo, escuchando dos fuertes ovaciones con saludos.
El francés Dorian, esta muy verde, le falta mucho por aprender. No se puede torear a base de manejar los engaños como si fueran látigos, o sea trapazos, Le queda mucho por aprender y pulir. Fue silenciado en sus dos novillos.
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